Los cigarrillos electrónicos perjudican la salud
El tabaco es un producto perjudicial para la salud de quien lo consume e incluso para aquellos que rodean a una persona que está fumando. El consumo de tabaco puede provocar en las personas enfermedades pulmonares, cáncer o enfermedades cardiacas. Estos son los principales problemas de salud que causa el tabaco en el organismo de las personas. Además de provocar otros efectos a causa del olor que desprenden los cigarrillo. En este caso hablamos por ejemplo del mal aliento y del olor que deja el tabaco en la ropa.
Todo esto o incluso las recomendaciones de las personas de su entorno pueden llevar a un fumador a plantearse dejar el tabaco. Algunos se deciden por dejar el tabaco definitivamente. Sin embargo, otros están dispuestos a intentar dejar el tabaco pero sustituyéndolo por un producto similar que pueda ser más saludable. Son muchos los productos que según los expertos pueden cumplir la misma función del tabaco. Pero en este caso estamos hablando del producto que por sus características y forma de consumirse es el más parecido y, por lo tanto, el único que están dispuestos a probar muchos fumadores, el cigarrillo electrónico.
El cigarrillo electrónico se plantea como una alternativa al tabaco tradicional pero ¿es realmente bueno para la salud? A continuación, vamos a conocer todos los detalles sobre el cigarrillo electrónico y cuáles son sus efectos en el organismo.
Lo primero que hay que saber es qué es el cigarrillo electrónico, cómo es y cómo funciona. Pues bien, el cigarrillo electrónico tiene una forma muy similar al tabaco tradicional, es decir, redondo y alargado. Sin embargo, no está fabricado del mismo material. Cuenta con una estructura principalmente hecha de plástico y está formado por una boquilla, un depósito o vaporizador y una batería.
Su apariencia es similar a la de un cigarrillo tradicional, exceptuando que el material no es el mismo. Esto nos lleva directamente a su forma de uso, donde también encontramos diferencias con el tabaco tradicional. Como hemos dicho, una de las partes que forma el cigarrillo electrónico es una batería. Aquí está la diferencia en el consumo. En vez de funcionar con fuego, se enciende gracias a una batería que debe cargarse previamente. Por otra parte tenemos lo que es el interior del cigarrillo. En este caso, el depósito se rellena con un líquido, que es lo que posteriormente se va a consumir. Y las sustancias que contiene principalmente son propilenglicol, glicerina vegetal y aromas, aunque también contiene nicotina.
Por último, hay que decir que la forma de consumirlo es muy similar a la del tabaco tradicional, ya que no deja de tener la misma forma y se basa en un mecanismo de inhalación. Como vemos, el cigarrillo electrónico tiene una composición diferente a la del tabaco tradicional, pero esto no quiere decir que no sea perjudicial para la salud. Y eso es lo siguiente que vamos a conocer.
¿Cómo afectan los cigarrillos electrónicos al organismo?
Son evidentes las diferencias entre el tabaco tradicional y los cigarrillos electrónicos, sin embargo estos últimos también son perjudiciales para la salud. Aunque los efectos pueden ser menores con respecto al tabaco tradicional, los cigarrillos electrónicos provocan alteraciones en los pulmones y en la función respiratoria. Causando también irritación en la garganta y en los ojos. Al contener nicotina, que además es una sustancia adictiva, esto puede producir problemas cardiovasculares, respiratorios y cáncer.
En definitiva, se trata de un producto que puede parecer menos perjudicial para la salud que el tabaco tradicional, puesto que no está formado por los mismos componentes. Pero está demostrado que el cigarrillo electrónico también tiene consecuencias adversas para la salud de quien lo consume, por lo tanto no se presenta como una alternativa real al tabaco tradicional para dejar de fumar, ya que sigue causando efectos similares.
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