¿Cómo afecta el tabaco a tu visión?
Como la mayoría de la población sabe, el consumo de tabaco es una práctica perjudicial para el organismo, llegando a provocar con frecuencia enfermedades cardiovasculares e incluso cáncer. Pero, ¿has pensado alguna vez cómo afecta el tabaco a tu visión?
Fumar es tan malo para sus ojos como para el resto de su cuerpo. Consumir tabaco puede tener problemas graves en los ojos que podrían causar la pérdida de la visión o ceguera.
Al inhalar el humo de un cigarro cientos de sustancias tóxicas pasan, a través de los pulmones, al torrente sanguíneo. Así, la sangre reparte esas sustancias tóxicas por todos los órganos del cuerpo, incluidos, por supuesto, los ojos.

¿Qué tipo de trastornos oculares puede provocar el tabaco?
El hábito de fumar puede aumentar el riesgo de padecer las siguientes enfermedades oculares:
- Cataratas: la catarata es la patología que aparece con mayor frecuencia en fumadores. Consiste en que el cristalino del ojo se vuelve opaco, dando lugar a una vista borrosa. Entre sus síntomas encontramos la visión doble, deslumbramiento con las luces y pérdida de visión nocturna.
- Ojo seco: este trastorno se da cuando los ojos no producen suficiente lágrima, o ésta no hidrata el ojo de forma adecuada. Si fuma y tiene este trastorno, agravará los síntomas de esta patología, ya que el tabaco provoca sequedad ocular e irritación.
- Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE): en esta enfermedad una parte de la retina, la mácula, se daña y esto provoca que haya una pérdida de visión central. No existe cura para este trastorno que puede causar graves problemas visuales; aunque sí existen tratamientos y recomendaciones para frenarlo.
- Retinopatía diabética: los diabéticos que, además, son fumadores pueden desarrollar con mayor frecuencia retinopatía. Ésta se produce cuando se dañan los vasos sanguíneos de la retina. Puede ser necesario un tratamiento con láser, con medicación inyectada o incluso cirugía para controlar la enfermedad.
- Uveítis: fumar puede comportar contraer uveítis, una inflamación que se produce en la capa media del ojo llamada úvea. Como consecuencia, el ojo se enrojece y provoca dolor y problemas de visión.

Otras consecuencias
Fumar no sólo afecta a los globos oculares, también afecta a lo que los rodea. Así, los ojos amarillos y las bolsas en los ojos son dos consecuencias de fumar muy comunes.
Los ojos amarillos en los fumadores pueden estar provocados por la acción del humo sobre el cristalino, ya que el humo del tabaco daña los elementos del ojo que se encargan de mantener su transparencia.
Por otro lado, los ojos amarillos pueden ser indicadores de una afección más grave, a su vez consecuencia del tabaquismo, como problemas en el páncreas, en el hígado o incluso cáncer.
Respecto a las bolsas en los ojos, la nicotina que se libera en el organismo de los fumadores durante la noche hace que su calidad del sueño sea peor, por lo que suelen mostrar esas bolsas en los ojos tan características.
Sin duda, el tabaco produce importantes riesgos para la salud ocular y para la salud en general. Si quieres dejar de fumar y cuidar tu salud, desde Laser Stop sabemos cómo ayudarte. Solo tienes que ponerte en contacto con nosotros y te contaremos todos los beneficios y las ventajas de utilizar nuestro láser para dejar de fumar.

